¿Cuánto puedo ahorrar con un equipo de Aerotermia?
Ahorrar en tu factura energética es posible gracias a los sistemas de aerotermia, una alternativa, además, sostenible.
Tras la pandemia son muchas las familias las que han tenido que adaptarse a una nueva vida, como transformar sus casas en oficinas. Esto sumado a la actual subida de los precios de la energía durante el invierno ha convertido en una necesidad el contar con equipos más eficientes que permitan ahorrar en la factura de la luz.
¿Qué podemos hacer para reducir el impacto de los precios energéticos? Una de las mejores soluciones es apostar por un sistema de climatización de alta eficiencia como la aerotermia.
Es muy común leer en algunas publicaciones, así como escuchar hablar a los fabricantes e instaladores de aerotermia, que estos equipos consumen una cuarta parte de lo que generan, o lo que es lo mismo, que producen hasta un 70-75 % de energía gratis para nuestros hogares. Pero ¿de dónde salen estos valores? ¿Realmente un equipo que consume energía eléctrica puede generar ahorro?
En este artículo resolveremos tus dudas y te explicaremos por qué la aerotermia permite reducir el consumo de energía y cuánto podrías ahorrar en la factura de la luz.
CÓMO FUNCIONA LA AEROTERMIA Y EL TRANSPORTE DE LA TEMPERATURA EXTERIOR E INTERIOR
La aerotermia se basa en el principio de funcionamiento de la bomba de calor, la cual consiste en una tecnología capaz de transportar el calor entre el interior y el exterior de una vivienda según nuestra conveniencia. Por ejemplo, si nuestro objetivo es conseguir calefacción o agua caliente sanitaria, cogeríamos el calor del exterior y lo introduciríamos en el interior de nuestra vivienda. En el caso de querer refrigerar el hogar, cogeríamos el calor del interior de la vivienda y lo sacaríamos al exterior para refrescarla.
Su función basada en transportar calor de un lugar a otro es su mayor virtud, ya que permite que el equipo tenga una enorme eficiencia al aprovechar la energía que se encuentra en el aire en forma de calor. Sin embargo, también tiene sus puntos débiles, y es que al tratarse de un equipo que transporta calor, depende de las temperaturas tanto exterior como interior para poder explotar al máximo sus capacidades.
En épocas invernales donde buscamos calentar la vivienda, la capacidad de la bomba de calor disminuye a medida que se reduce la temperatura exterior, ya que es más difícil extraer calor del exterior de la vivienda si las temperaturas son bajas. Además, este hecho hace que la bomba de calor también deba aumentar su consumo para lograr un confort en la vivienda.
Por otro lado, en épocas de verano sucede una situación similar. Como las temperaturas en el exterior son muy altas, para la aerotermia es más difícil refrigerar la vivienda, lo que provoca un aumento en el consumo a la vez que reduce la potencia. Esta relación entre la potencia entregada en la vivienda y la potencia consumida es lo que llamamos COP para calefacción y EER para refrigeración, y se trata de un concepto recurrente en los cálculos de aerotermia para entender por cuánto se multiplica el ahorro energético de la vivienda.
Como norma general, se habla de que las bombas de calor de aerotermia tienen un COP/EER de cuatro o cinco, es decir, aportan a la vivienda cuatro o cinco veces más energía de la que consumen. Teniendo en cuenta que el COP/EER es la relación entre la potencia entregada y la consumida, cuanto mayor sea este valor, mayor será el ahorro energético que se obtendrá de la aerotermia para climatizar nuestra vivienda.
Esto nos puede llevar a pensar que en zonas frías el ahorro que podemos obtener con la aerotermia es menor, ya que el COP se reduce debido a una reducción en la potencia entregada en la vivienda de la aerotermia y un aumento de la potencia consumida para lograr una temperatura de confort en el hogar. Pero, ¿es cierto que el ahorro disminuye en zonas frías?
CUÁL ES EL CONSUMO DE ENERGÍA DE LOS EQUIPOS DE AEROTERMIA
El consumo de la aerotermia, así como el de cualquier generador, depende directamente del uso que hagamos de ella. Es decir, a mayor uso de los servicios de calefacción, refrigeración y ACS, mayor es el consumo del equipo.
Este es uno de los principales motivos por los cuales generalizar sobre el consumo de la aerotermia en una vivienda no es una tarea sencilla si no se conocen los hábitos de consumo del usuario (si pasa la mayor parte del día en casa, si hace mucho uso de la calefacción o refrigeración, etc.). Por esta razón es más sencillo tratar el ahorro en términos relativos.
En el apartado anterior hemos hablado del COP y el EER y como estos datos afectan al consumo de la aerotermia. Generalmente nos encontraremos con que los COP (relación entre energía entregada y consumida) son menores en zonas más frías. Esto nos suele llevar a pensar que en estas zonas frías se ahorra menos con la aerotermia, pero esto no tiene por qué ser así.
En las zonas más frías, como es lógico, se suele hacer un mayor uso de la calefacción y agua caliente sanitaria durante el invierno. Esto hace que, aunque el COP disminuya, si el consumo anual para climatizar la vivienda es mayor, el ahorro total con la aerotermia puede seguir siendo igual o superior que en otras zonas. Lo vemos en los siguientes ejemplos:
EN UNA ZONA DE TEMPERATURA MEDIA DONDE EL COP ES DE 4:
- Energía para climatizar la vivienda en un mes: 400 kWh
- Consumo de la aerotermia: 100 kWh
- Ahorro de energía con la aerotermia: 300 kWh
EN UNA ZONA DE TEMPERATURA FRÍA DONDE EL COP ES DE 2,5:
- Energía para climatizar la vivienda en un mes: 600 kWh
- Consumo de la aerotermia: 240 kWh
- Ahorro de energía con la aerotermia: 360 kWh
Como se puede observar, a pesar de que el COP puede disminuir en zonas frías, en términos energéticos se puede lograr un mayor ahorro energético gracias a los equipos de aerotermia. Sin embargo, a nivel de ahorro económico debemos tener en cuenta otros factores que influyen en la variación de nuestra factura de la luz como, por ejemplo, el precio de la electricidad.
CÓMO INFLUYE EL PRECIO DE LA ELECTRICIDAD EN EL CONSUMO DE LOS EQUIPOS DE AEROTERMIA
Visto cómo afectan la temperatura exterior, el COP y el consumo de la vivienda en el ahorro energético que puede aportar un equipo de aerotermia, hay que valorar cómo este se transforma en ahorro económico.
La energía la pagamos en función de las tarifas eléctricas que tengamos contratadas, y en el mercado existen distintos tipos de tarifas. Las principales diferencias van desde tarifas planas donde el precio de la electricidad es el mismo a lo largo de todo el mes, hasta tarifas con discriminación horaria, donde el precio puede variar en función de la hora del día en la que se consuma.
Esto quiere decir que, aunque el consumo energético sea similar en dos viviendas, el ahorro económico puede varias en función de la tarifa contratada. Es por ese motivo que cobra especial importancia la revisión de nuestra tarifa eléctrica a la hora de instalar nuestra aerotermia, ya que maximizaremos los ahorros energéticos y económicos, a la vez que conseguiremos una mayor sostenibilidad con el medio ambiente. Por ello, debemos conocer bien nuestros hábitos de consumo y contratar la tarifa que mejor se ajuste a nuestras necesidades.
El precio de la electricidad es un factor determinante en el ahorro que podemos obtener con la aerotermia, pero no podemos tener una idea clara de cuánto ahorro económico podemos llegar a obtener sin realizar una comparación con otros combustibles. En el siguiente punto vamos a analizar algunos casos para poder tener una idea más clara.
CUÁNTO AHORRO SE PUEDE OBTENER CON LA AEROTERMIA RESPECTO A OTROS COMBUSTIBLES
Como hemos podido ver, el consumo de la aerotermia depende en gran medida de varios factores, como el COP obtenido en función de la temperatura exterior, el uso que hagamos de la calefacción o el precio que paguemos por la electricidad.
Pero si queremos realmente hacer una comparativa con el ahorro que podemos obtener con la aerotermia respecto al sistema que tenemos instalado, debemos compararlo con el precio del combustible o energía que utilicemos actualmente en nuestras viviendas.
Los sistemas más comunes para la generación de calefacción y ACS en viviendas son: calderas o calentadores de gas, caldera de gasóleo, caldera de biomasa o equipos eléctricos (calderas eléctricas, termos, etc.). También existen otros sistemas como los aires acondicionados, que utilizan la misma tecnología de bomba de calor que la aerotermia. Si quieres conocer más sobre ello puedes verlo aquí.
Hay que tener en cuenta que la mayoría de este tipo de generadores tiene una relación entre la energía entregada y la energía consumida de entre 0,9 y 0,98. Si lo comparamos con la aerotermia donde ya hemos visto anteriormente que esta relación puede ser de 4, nos damos cuenta de que se requiere un consumo energético mucho mayor en los sistemas tradicionales para obtener el mismo nivel de confort o de energía entregada en la vivienda.
Una vez definida la relación entre la energía consumida y la energía entregada de los sistemas tradicionales, solo nos quedaría por fijar los precios de los combustibles:
- Precio medio gas: 0,11 €/kWh
- Precio medio gasóleo: 0,15 €/kWh
- Precio medio electricidad: 0,27 €/ kWh
Una vez definido el precio de las distintas fuentes de energía solo se debe hacer un cálculo para conocer la demanda energética de nuestra vivienda, y poder aplicar los precios de uno y otro combustible en base a su rendimiento. Lo vemos con dos ejemplos con la energía mensual necesaria para climatizar una vivienda (es importante destacar que estos precios son orientativos en el momento de la redacción del artículo, pueden variar dependiendo de las tarifas y estacionalidad):
Esto es un ejemplo de unos ahorros que se pueden llegar a obtener en un caso muy particular, aunque en algunos casos los ahorros obtenidos pueden ser superiores en función del uso energético que se requiera en la vivienda y las tarifas contratadas.
CÓMO AUMENTAR EL AHORRO EN EL CONSUMO DE LA AEROTERMIA CON LA ENERGÍA FOTOVOLTAICA
Como hemos podido ver, solo por instalar un equipo de aerotermia en sustitución de una caldera se pueden lograr grandes ahorros energéticos y económicos. Aun así, existe la posibilidad de aumentar estos ahorros con los paneles fotovoltaicos.
Los paneles fotovoltaicos son una tecnología que permite producir energía eléctrica a través de la energía solar. Estos absorben la energía del sol y la transforman en energía eléctrica para nuestros hogares, que puede ser aprovechada por nuestra aerotermia para producir energía térmica en la vivienda sin consumir electricidad de la red.
Hay que tener en cuenta que los paneles producen electricidad que no solo será aprovechada por nuestros equipos de aerotermia, sino que lo hará para toda nuestra vivienda, y que nos puede servir para reducir también el consumo de la luz, o de otros equipos como el horno, la nevera, el microondas, etc.
Por ese motivo es cada vez más común realizar este tipo de instalaciones conjuntamente, ya que cuando combinamos energía fotovoltaica y sistemas de aerotermia en una misma vivienda, se pueden llegar a conseguir consumos casi nulos.
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Fuente: BAXI